¿Te has topado alguna vez con un trans económico? Si bien es cierto que no soy muy amante de las etiquetas, hay que reconocer que, en ocasiones, son la forma más fácil para entender una filosofía o un concepto determinado. Así como un animalista es una persona defensora de los animales y un vegetariano es aquella que no come carne, también hay un término que define al amante del ahorro, que a continuación vamos a conocer y a analizar.

¿Qué es un trans económico?

Y no me estoy refiriendo al tacaño, sino al que sabe comprar con inteligencia porque valora lo bueno, bonito y barato. A estas personas se les llama transeconómicas. Y es que cada vez son más los que se apuntan a la corriente de no pagar más por aquello que quieren, de buscarse la vida para pagar menos que el de al lado ¡y presumir de ello!

En otras palabras, una persona trans económica es aquella a la que no le gusta que le tomen el pelo con su dinero. Si hay que pagar, se paga, pero siempre de la forma que más beneficie a su bolsillo sin renunciar a la máxima calidad y garantías.

Te podría poner mil ejemplos de prácticas transeconómicas: buscar el mejor billete de avión por el precio más económico, utilizar cupones de descuento para aplicarse el último tratamiento de belleza o comprarse el bikini más elegante en pleno mes de enero porque sale mucho más económico.

Sin embargo, me voy a centrar en cuál es la práctica transeconómica para comprar inmuebles de obra nueva: la cooperativa de viviendas.

Comprar casa a través de una cooperativa para los amantes del ahorro (¡trans-económicos!)

Todo aquel que se precie de ser un trans económico de los pies a la cabeza, tiene meridianamente claro que, cuando vaya a comprar obra nueva, lo va a hacer a través de una cooperativa.

Cuando conoce las ventajas de las cooperativas de viviendas, su razonamiento es tan lógico que nadie podría desmontárselo: “¿por qué voy a pagar más por una vivienda si me puedo comprar la misma ahorrando en torno a un 20% y pagando la entrada a plazos?”.

Un error frecuente que comenten algunos es considerar que las personas trans económicas tienen poco poder adquisitivo. ¡Nada más lejos de la realidad!

El poder adquisitivo no tiene nada que ver con la filosofía de la persona transeconómica. Tanto si busca comprarse un casoplón de lujo en el barrio más selecto como si opta por un piso de dos dormitorios en una zona residencial, su pensamiento siempre será el mismo: me lo compro a través de una cooperativa porque me sale más barato y me ofrece mejores condiciones de pago.

Por ponerte un ejemplo, en algunas de las parcelas más caras de las grandes urbes como Madrid, Barcelona o Valencia, muchas viviendas se construyen a través de cooperativas.

¿Qué tipo de vivienda se puede comprar a través de una cooperativa?

Aquí es cuando se llega a entender el gran protagonismo que las cooperativas de viviendas han alcanzado en la obra nueva y cómo el perfil de socio cooperativista está en todos los estratos sociales.

A través de una cooperativa de viviendas puedes comprar todo tipo de viviendas, desde pisos protegidos hasta vivienda de lujo. Y, por supuesto, de todas las tipologías: bajos con jardín, pisos con terraza, áticos con vistas inmejorables, chalets adosados o pareados, e incluso casas prefabricadas o modulares. Existen viviendas para todos los gustos.

Si eres un trans económico o, simplemente, estás interesado en comprar obra nueva a través de una cooperativa, debes saber que todos los tipos de vivienda te esperan en LACOOOP.

 


Trans económico: amante del ahorro al comprar casa | Fotocasa